La cubomancia es la adivinación por lanzamiento de los dados.
En Grecia era utilizada sobre todo como Oráculo de amor; las buenas jugadas a los dados anunciaban felicidad, las malas jugadas, una decepción.
La mejor de todas las combinaciones obtenidas era, tanto en Roma como en Grecia, la “jugada de Venus o de Afrodita”, en la que cada uno de los dados presentaba una cara distinta.
La diferencia entre los dados y las tabas, ambos utilizados para adivinación, estribaba en el hecho de que los dados tenían seis caras, mientras que las tabas utilizadas sólo tenían cuatro.
Además, siempre se jugaba con cuatro tabas, mientras que los dados podían ser lanzados de uno en uno, de dos en dos, o de tres en tres.
Los dados de los antiguos estaban marcados como los nuestros, en cambio, las tablas no lo estaban.
Si la respuesta no es clara, no debemos extrañarnos, la suerte es caprichosa.
En el caso de que no podaís entender nada, recurrir a otros medios de adivinación.