Gonzalo Torrente Ballester declaró durante una
conferencia, que "los andaluces son los que mejor hablan el castellano,
con independencia de su pronunciación".
Para el escritor gallego, afincado en Salamanca,
"la riqueza léxica y sintáctica de los andaluces es
extraordinaria", sobre todo en las clases populares.
Cuando voy a Andalucía y caigo al lado de un grupo
que está hablando me quedo turulato.
En Andalucía están vivas una serie de palabras y de
expresiones que han muerto en el resto de España.
Es el suyo el arte de burlarse de la gramática para
que la frase sea más expresiva.