TROYA
Troya o Ilión, también llamada Pérgamo en la antigüedad, era la capital de Troade, región de Asia Menor, situada cerca del Bósforo. Fundada por los pelasgos hacia el 1500 aC., o por Dardano, o Tros, su nieto, su historia se confunde con las épocas mitológicas griegas.
Los trabajos arqueológicos realizados por Heinrich Schliemann (1822-1880), un judío, deslumbrado desde su infancia por la lectura de la Iliada, revelaron el emplazamiento de la ciudad de Ilión en la colina de Hissarlik de la actual Turquía.
Allí se descubrieron importantes tesoros que fueron sacados con sigilo del lugar.
Hasta entonces Ilión y la Iliada fueron consideradas, durante milenios, pura imaginación de Homero y de los cantos de otros bardos en los que éste se inspiró.
Los numerosos niveles que distinguieron los arqueólogos, en el mismo lugar, correspondieron a destrucciones y refundaciones sucesivas de la ciudad sobre el mismo asentamiento, algunas de ellas fueron recogidas por la mitología: después de la construcción de las murallas atribuida a Poseidón y Apolo, fue saqueada por Hércules bajo el reinado de Laomedonte, que murió con casi todos sus hijos, ya que solo sobrevivió Príamo.
La guerra de Troya debió comenzar hacia el 1220 a.C. y la ciudad cayó en el 1209 a.C.
El geógrafo griego Eratóstenes fechó la guerra de Troya entre el 1194 y el 1184. Arqueólogos modernos la fecharon con anterioridad, entre el 1570 y el 1200 a., en la Edad del Bronce o micénico reciente, ya que el hierro solo era empleado como artículo ornamental por los protagonistas de epopeya homérica.
El Rapto de Helena fue el pretexto para desencadenar la guerra de Troya, aunque los verdaderos motivos debieron ser otros, ya que los estados griegos fueron presionados desde el norte, por pueblos que ya dominaban las armas de hierro y que penetraron en Grecia durante los últimos siglos del segundo milenio anterior a nuestra era (a., o a.C., o ane.).
Muchos reinos griegos debieron verse impulsados a buscar nuevos horizontes y atacaron Troya para hacerse con las rutas comerciales que los troyanos controlaban por su control del Estrecho de los Dardanelos y de las costas de Asia Menor.
La coalición de las tribus griegas contra los "bárbaros" asiáticos contó con un ejército de unos cien mil hombres bajo el mando de Agamenón, rey de Argos, el más destacado reino de Grecia, al que acompañaron: su hermano Menelao, rey de Esparta; Nestor, rey de Pilos; Aquiles, rey de Ftía (Tesalia), país de los mirmidones; Ulises, rey de Itaca y otros reyes y héroes como Diomedes, Ayax, Idomeneo, Filoctetes, etc.
La ciudad cayó y fue incendiada, después de 10 años de asedio, y los supervivientes fueron exterminados o reducidos a esclavitud y deportados.
El único héroe que se salvó fue Eneas, protagonista de la "Eneida" de Virgilio, quien erró largo tiempo antes de establecerse en Italia y fundar una estirpe en la que Roma quiso hallar sus remotos y legendarios orígenes.