El 14 de diciembre de 1591, muere en Úbeda (Jaén),
San Juan de de la Cruz ,
religioso y poeta místico del renacimiento español.
Tras un nuevo enfrentamiento doctrinal en 1590, es destituido en 1591 de todos
sus cargos, y queda como simple súbdito de la comunidad. Durante su viaje de
vuelta a Segovia, cae enfermo en el convento de La Peñuela de La Carolina y es trasladado
a Úbeda, donde muere la noche del 13 al 14 de diciembre.
Inmediatamente tras su muerte, su cuerpo es despojado y se inician los pleitos
entre Úbeda y Segovia por la posesión de sus restos. En 1593, éstos, mutilados,
se trasladan clandestinamente a Segovia, donde reposan actualmente. El proceso
de beatificación y canonización se inició en 1627 y finalizó en 1630. Fue
beatificado en 1675 por Clemente X y canonizado por Benedicto XIII en 1726.
Posteriormente, el 24 de agosto de 1926, Pío XI lo proclama Doctor de la Iglesia Universal.
El Manuscrito de Jaén es uno de los manuscritos
antiguos que recoge la obra poética y los comentarios a la misma del poeta. Su
principal importancia radica en que procede de la segunda redacción que el
santo realizó de Cántico espiritual, llamada más tarde «Cántico B». Con esta
segunda redacción el santo amplió y remodeló el texto para hacerlo más
coherente y ampliarlo a la totalidad de la vida espiritual, para ello desplazó
ciertas estrofas, añadió una estrofa suplementaria y desarrolló ciertos pasajes
de su comentario.
Está versión sirve actualmente de base a las ediciones de esta Cántico
espiritual.
Se conserva en el Monasterio de Santa Teresa de Jesús de Jaén.
(Imagen: Oratorio de San Juan de la
Cruz en Úbeda, donde fue sepultado al morir.)