LA CHICA “ESCORPIO”
La mujer Escorpio tiene una belleza profunda y
misteriosa. Es magnética, orgullosa y totalmente segura de sí, pero tiene un
único dolor secreto: no haber nacido hombre.
Desde aquí puedo casi percibir la furia, cuando las
mujeres Plutonianas oigan esta revelación. No hay hembra Escorpio que no se
sienta mujer de pies a cabeza, y hasta mi lector, si está enamorado de una de
ellas, se preguntará de qué estoy hablando. Como si esa chica no tuviera
encanto y seducción más que suficientes. Pero yo no he dicho que tuviera
aspecto masculino, ni tengo intención de insinuar que en su papel de mujer no
se desempeña estupendamente. Es sólo que, en un nivel inconsciente, preferiría
ser hombre. Menos restricciones, más oportunidades. Es el único secreto que la
mujer Escorpio se oculta incluso a sí misma, y no le hace gracia verlo revelado.
Una vez que la niña Escorpio ha entendido la
diferencia entre escarpines rosados y celestes, se resignará a usar los
rosados, porque no hay nadie mejor para sacar el mejor partido de una
situación. Pero el rosa no es su color natural. El verdadero matiz de su
naturaleza es el castaño oscuro o un profundo rojo vino, colores nada
femeninos. Sin embargo, hay que reconocer que ella es muy capaz de hacerte
creer que lo son. Conozco una que es maestra en el arte de mostrarse como una
gatita frágil y vaporosa. Ronronea de manera tan convincente que la mayoría de
los hombres la toman por una ultra femenina Piscis, caen en la trampa y, cuando
se despiertan, están magullados, pero algo han aprendido: no era una gatita.
Las mujeres Escorpio desdeñan a los miembros de su
sexo que fracasan como novia, esposa y madre, una vez que ha aceptado los
papeles. Una chica Plutoniana mantendrá a raya su deseo de dominar, mientras
hace una magnífica demostración de feminidad, y lo hará con más sutileza que
las más masculinas Aries, Leo o Sagitario. Por lo menos, actuará de es modo
mientras dure el galanteo. En algunos casos, el varón desprevenido se llevará
la gran sorpresa cuando se sacuda el arroz de los zapatos y las ilusiones de
los ojos. A diferencia d las mujeres marcianas, por ejemplo, Escorpio sujetará
sus impulsos y magnetizará a un hombre con el denso perfume de su mirada
exótica, al tiempo que se deja encender lánguidamente el cigarrillo; es una
actitud mucho mas sexy que prender ella misma, agresivamente, un fósforo y
echarle a él el humo en la cara. Y Escorpio lo sabe... y sabe muchas otras
cosas. Tal ve otra chica se te arrojaría en los brazos y proclamaría a grita su
amor desde los tejados. Escorpio se te acercará andando de manera lenta y
seductora, y te transmitirá en silencio y privadamente su mensaje. Es
increíble, pero son mujeres que puede mostrarse seductoras en tejanos,
pantalones de montar o zapatillas de baloncesto. Tal vez eso sea debido a su
voz ronca acariciante. Se de una que usaba siempre un gorro de béisbol (en
serio) durante todo el tiempo que su futuro marido la cortejó, y se pasaba el
tiempo hablando de los resultados de los partidos. De todas maneras, estaba tan
seductora como Mata Hari, y se salió con la suya (le hipnotizó, como siempre).
Es posible que la impresiones, pero no que
reaccione ansiosamente ante tu aproximación. No esperes que entorne insinuantes
y largas pestañas al mirarte, ni que te adore con devoción ciega. Muchas
mujeres Escorpio, amén de lo independientes, tienen pestañas cortas. Además,
con esos bellos ojos misteriosos capaces de leer con tanta claridad el
pensamiento, no necesita mucho más adornos. Susúrrale algo romántico que a otra
chica le haría perder la cabeza, y Escorpio se limitará a clavarte una mirada
intensa y penetrante que desnudará inmediatamente tus intenciones mas
auténticas. Es un aparato humano de rayos x, así que no flirtees con ella. Si
no la tomas en serio, le estas haciendo perder el tiempo e insultándola, y yo
no te aconsejaría que insultes a Escorpio; puede ser peligroso. Si no sabes a
que me refiero, pregúntale a alguien que lo haya hecho, y es posible que te
cuente algunas historias que te pondrán los pelos de punta.
Bien se yo que esta peligrosa femme fatale puede
ocultar sus vengativos poderes tras una sonrisa trémula, modales encantadores y
la voz más sobrecogedora que imaginarse pueda. Pero los astrólogos tenemos que
ser versados en estas cosas, y es importantísimo que sepas en que te metes.
Después de todo, eres tú quien está empeñado en domesticarla... o en protegerte
de ella, lo que sea. Probablemente las dos cosas.
Puedes estar seguro de que el cielo no sabe de
furias como las de una Escorpio cuando pierde su firme control habitual sobre
las intensas emociones íntimas de Plutón. Puede ser despótica y dominante,
sarcástica y frígida, y después llegar a una temperatura de 1OO grados. Es
capaz de poner cruel veneno en el odio y abandono orgulloso en el amor, de
vociferar como una arpía furiosa o de susurrar como la más afectuosa de las
tórtolas, pero de una cosa puedes estar seguro: jamás se quedará en las medias
tintas.
La mujer Escorpio tiene un don desconcertante que
puede hacer que te corran por la columna escalofríos de hielo. Es una forma
peculiar de magia negra, que ella maneja con tal pericia como para hacer que
parezca auténtica brujería. Una vez que tus ojos se hayan encontrado con los de
ella, tienes muy pocas posibilidades de escapar. Con su místico sexto sentido,
es frecuente que Escorpio pueda reconocer a su futura pareja en la primera
mirada, y de alguna manera transmitirá instantáneamente lo que percibe. Tus reacciones
pueden ser de dos clases. O quedarás irremediablemente atrapado en su hechizo e
irás tambaleante a entregarte con armas y bagajes o, presa de un terrible
susto, tendrás ganas de escapar pidiendo socorro. ¿Que prisa te corre?
Quédate por ahí un rato. Es posible que termines
por encontrar que es eso de la vida; ella lo sabe. Y te lo enseñará. En todo
caso, deberías sentirte halagado de que te considere digno de su extraña
mirada. Una mujer Escorpio no puede disculpar la debilidad en un hombre; lo que
ella busca es ambición y valor. Quiere un varón capaz de dominarla y de hacerla
sentir orgullosa, sin que, por eso, perturbe su individualidad secreta. Espera
que él sea fuerte, masculino y más apuesto que los que fracasan como novia,
esposa y madre, una vez que han aceptado los papeles. Una chica Plutoniana
mantendrá a raya su deseo de dominar, mientras hace una magnifica demostración
de feminidad, y lo hará con mas sutileza que las mas masculinas Aries, Leo o
Sagitario. Por lo menos, actuará de ese modo mientras dure el galanteo. En
algunos casos, el varón desprevenido se llevará la gran sorpresa cuando se
sacuda el arroz de los zapatos y las ilusiones de los ojos. A diferencia de las
mujeres marcianas, por ejemplo, Escorpio sujetara sus impulsos y magnetizara a
un hombre con el denso perfume de su mirada exótica, al tiempo que se deja
encender lánguidamente el cigarrillo; es una actitud mucho mas sexy que prender
ella misma, agresivamente, un fósforo y echarle a él el humo en la cara. Y
Escorpio lo sabe... y sabe muchas otras cosas. Tal vez otra chica se te
arrojaría en los brazos y proclamaría a gritos su amor desde los tejados.
Escorpio se te acercará andando de manera lenta y seductora, y te transmitirá
en silencio y privadamente su mensaje. Es increíble, pero son mujeres que
pueden mostrarse seductoras en tejanos, pantalones de montar o zapatillas de
baloncesto. Tal vez eso sea debido a su voz ronca y acariciante. Se de una que
usaba siempre un gorro de béisbol (en serio) durante todo el tiempo que su futuro
marido la cortejó, y se pasaba el tiempo hablando de los resultados de los
partidos. De todas maneras, estaba tan seductora como Mata Hari, y se salió con
la suya (le hipnotizó, como siempre).
Es posible que la impresiones, pero no que
reaccione ansiosamente ante tu aproximación. No esperes que entorne insinuantes
y largas pestañas al mirarte, ni que te adore con devoción ciega. Muchas
mujeres Escorpio, amén de las independientes, tienen pestañas cortas. Además,
con esos bellos años misteriosos capaces de leer con tanta claridad el
pensamiento, no necesita mucho más adornos. Susúrrale algo romántico que a otra
chica le haría perder la cabeza, y Escorpio se limitará a clavarte una mirada
intensa y penetrante que desnudará inmediatamente tus intenciones mas
auténticas. Es un aparato humano de rayos x, así que no flirtees con ella. Si
no la tomas en serio, le estás haciendo perder el tiempo e insultándola, y yo
no te aconsejaría que insultes a Escorpio; puede ser peligroso. Si no sabes a
que me refiero, pregúntale a alguien que lo haya hecho, y es posible que te
cuente algunas historias que te pondrán los pelos de punta.
Bien sé yo que esta peligrosa femme fatale puede
ocultar sus vengativos poderes tras una sonrisa trémula, modales encantadores y
la voz más sobrecogedora que imaginarse pueda. Pero los astrólogos tenemos que
ser versados en estas cosas, y es importantísimo que sepas en que te metes.
Después de todo, eres tú quien está empeñado en domesticarla... o en protegerte
de ella, lo que sea. Probablemente las dos cosas.
Puedes estar seguro de que el cielo no sabe de
furias como las de una Escorpio cuando pierde su firme control habitual sobre
las intensas emociones íntimas de Plutón. Puede ser despótica y dominante,
sarcástica y frígida, y después llegar a una temperatura de 1OO grados. Es
capaz de poner cruel veneno en el odio y abandono orgulloso en el amor, de
vociferar como una arpía furiosa o de susurrar como la más afectuosa de las
tórtolas, pero de una cosa puedes estar seguro: jamás se quedará en las medias
tintas.
La mujer Escorpio tiene un don desconcertante que
puede hacer que te corran por la columna escalofríos de hielo. Es una forma
peculiar de magia negra, que ella maneja con tal pericia como para hacer que
parezca autentica brujería. Una vez que tus ojos se hayan encontrado con los de
ella, tienes muy pocas posibilidades de escapar. Con su místico sexto sentido,
es frecuente que Escorpio pueda reconocer a su futura pareja en la primera
mirada, y de alguna manera transmitirá instantáneamente lo que percibe. Tus
reacciones pueden ser de dos clases. O quedarás irremediablemente atrapado en
su hechizo e irás tambaleante a entregarte con armas y bagajes o, presa de un
terrible susto, tendrás ganas de escapar pidiendo socorro. ¿Que prisa te corre?
Quédate por ahí un rato. Es posible que termines
por encontrar que es eso de la vida; ella lo sabe. Y te lo enseñará. En todo
caso, deberías sentirte halagado de que te considere digno de su extraña
mirada. Una mujer Escorpio no puede disculpar la debilidad en un hombre; lo que
ella busca es ambición y valor. Quiere un varón capaz de dominarla y de hacerla
sentir orgullosa, sin que, por eso, perturbe su individualidad secreta. Espera
que él sea fuerte, masculino y más apuesto que el común de los hombres. Y para
estar a la altura de la mentalidad de ella se necesita, desde luego, un alto
grado de inteligencia, amén de una familiaridad algo más que superficial con la
sabiduría abstracta y filosófica. De manera que olvídate del susto y empieza a
practicar una sonrisa de superioridad. Todos tus conocidos se impresionarán al
ver que ella se te queda mirando; los hombres y las mujeres. Si lo piensas,
verás que te abre nuevas perspectivas. Tus acciones personales pueden llegar a
estar varios puntos más arriba que antes de que ella se fijara en ti.
Una vez que hayas conseguido la intimidad de una
mujer Escorpio, puedes estar seguro de que eres un hombre único y excepcional.
Y también de que el amor que ella siente por ti no tendrá parangón en ninguno
que jamás te toque vivir... y puedes creerlo esto en mas de un sentido. Tú
constituirás el interés fundamental de su vida y, si es una Plutoniana típica,
te apoyará con lealtad y procurará agradarte con intensidad apasionada. Y si
eres demasiado difícil de complacer, expresará su frustración con apasionados
intentos de ganarse tu atención.
Es probable que la palabra “apasionado” te haya
llamado la atención. A los oídos de la mayoría de los hombres han llegado
inquietantes rumores sobre la pasión de la mujer Escorpio. Pues son verdad. En
esta mujer, la pasión bulle hasta derramarse, por mas que ella la mantenga bajo
el control rígido de una actitud distante y fría hacia los extraños, y que su
suavidad superficial haga pensar en un terciopelo negro. Pero el sexo masculino
se inclina demasiado a considerar la pasión estrictamente como una acción
romántica, y en el caso de ella eso es subestimarla, porque la definición
Plutoniana de la palabra es muchísimo más amplio: se refiere a sus sentimientos
hacia todo cuanto toca. Escorpio jamás se interesa a medias; el desapego y la
indiferencia no se han hecho para ella. Es raro que le guste -o le disguste- un
libro, una obra de teatro, una religión, un mueble o una persona. O los rechaza
ásperamente o los adora. Si el objeto no llega a excitar ninguna de las dos
pasiones, entonces Escorpio lo ignora totalmente, con una frialdad de hielo.
Sin embargo, en medio de todo eso se mantendrá esencialmente ajena a las
tormentas emocionales... al menos a juzgar por su placidez exterior, en la que
se envuelve después de cada explosión nuclear, importante o no. Tal vez te
resulte difícil convencer a tu suegra de que fue realmente su hija la que
rompió todos esos platos e hizo pedazos aquellas cortinas, una vez que la furia
se ha disipado y ha vuelto la serenidad de terciopelo negro. Es posible que la
gente te mire como si fueras un regicida. ¿Qué es lo que dices? ¡A quién se le
ocurre acusar de mal genio a esa mujer encantadora, tan serena y dueña de sí!
Si de algo te sirve, cuenta con mi simpatía.
Sus virtudes son tan fabulosas, que podías esperar
que sus vicios tampoco fueran de poca monta, de modo que piensa en sus puntos
buenos. De acuerdo, entonces, piensa en sus puntos buenos cuando te haya
desaparecido el chichón que tienes en la cabeza.
Debido a su atracción por la investigación de las
sombras, Escorpio puede parecerte al principio un tentador fruto prohibido,
impresión que se intensifica por efecto de la expresión extraña y profunda de
sus ojos. Es verdad que estas muchachas se meten a veces en aguas peligrosas,
llevadas por su afán de penetrar la vida, y como en ellas no hay el más leve
rastro de miedo (a no ser que alguna tenga una influencia lunar desfavorable,
en cuyo caso estará acosada por innombrables terrores), su búsqueda puede llevarlas
por algunas sendas escalofriantes. Pero una Escorpio típica renacerá de todos
sus descubrimientos sin perder fuerza ni pureza. Si se dejara ensuciar
espiritualmente por sus andanzas, Plutón la castigaría con remordimiento,
angustia y culpa, pero aun así ella podría echar mano de su fuerza de carácter
para volver a levantarse, como el Fénix, de las cenizas de sus experimentos. En
El Profeta, de Kahlil Gibran, en respuesta a una pregunta sobre el Mal, el
Profeta replica: “Del bien que hay en vosotros, podré hablar, mas no del mal.
Pues, ¿qué es el mal sino el propio bien torturado por su hambre y por su sed?
En verdad, cuando el bien siente hambre, procura alimentarse hasta en nuestros
oscuros antros, y cuando siente sed, se sacia hasta en las aguas estancadas”.
Una perfecta descripción de Escorpio.
Es posible que haya sido fascinado testigo de un
millón de flaquezas humanas, y que haya probado múltiples experiencias por ver
a que sabe el conocimiento, pero, misteriosamente, es capaz de salir de todas
sus investigaciones limpia de sospecha y seguir siendo superior a casi todas
las demás mujeres que conozcas. Podría ser la guardiana de unos cuantos
secretos; es sorprendente cuantas confesiones recibe Escorpio, aunque su propia
vida lleve el cartel de: “Privado Prohibida la entrada”. A Escorpio le gusta
escuchar secretos, pero será raro que cuente algo de lo que le han confiado, ni
siquiera a ti (salvo que Mercurio sea desfavorable en su carta natal). También
puedes esperar que tenga un montón de secretos relacionados con su
personalidad, y no intentes adueñarte de ellos. En esta mujer hay un ámbito
privado que jamás alcanzarás, una parte de su mente y de su alma que le
pertenece exclusivamente a ella y en la cual no admite invasiones. Aunque no
mienta, y en realidad es más fácil encontrar en ella una sinceridad brutal,
siempre habrá esas cosas especiales -ideas, sentimientos- que no te confiará.
Ni a ti ni a ningún otro.
Una mujer de este signo mostrará una lealtad
increíble hacia aquellos a quienes considere fuertes y dignos, pero los débiles
jamás alcanzarán el honor de su mirada. Cuando se trata de relaciones humanas,
su dignidad puede hacer que parezca esnob y distante, y en cierto modo lo es,
porque practica su personal sistema de castas, más nítidamente definido que los
de sus hermanas Leo y Capricornio. Escorpio es siempre muy selectiva con sus
amistades. A los compañeros dignos de ella los conserva durante toda la vida; a
los superficiales, vulgares o indignos los excluye con su hielo. En la
naturaleza de una mujer Escorpio hay una reserva innata de perseverancia y
decisión, y siempre que así lo decida puede recurrir a estas cualidades para
que la ayuden a dominar los excesos, desde la bebida y las drogas hasta las
peligrosas depresiones y esas típicas formas de venganza autodestructiva. Tarde
o temprano, es probable que Escorpio se interese por alguna forma de ocultismo,
y que los antiguos misterios y los mundos nunca vistos se ganen su respeto,
aunque la gente Escorpio puede pasarse la vida en los extremos, desde el fervor
religioso al total ateismo.
Una mujer Escorpio no necesita la legalidad del
matrimonio para brindar el amor y la dedicación de una esposa. Si por
circunstancias que escapan de vuestro control el matrimonio es imposible, ella
te amará igualmente sin reservas, sin importarle un rábano lo que piensen los
vecinos. En la mayoría de este tipo de situaciones excepcionales, la relación
es mucho más profunda y mas seria que el amor superficial y egoísta que existe
en mas de un matrimonio legítimo. Las hipocresías de la sociedad no impedirán
jamás que estas mujeres valerosas vayan en pos del sol. Escorpio no obedece a
otra ley que la suya propia, y en su corazón Plutoniano tiene una compresión
mas cabal del clásico “hasta que la muerte nos separe” que la mitad de las
novias que balbucean embelesadas esa misma frase.
Pese a su fuerte individualismo, la muchacha típica
Escorpio dejará que sea su marido quien lleve las riendas. En vez de
atropellarle con su fuerza y su impulso, contribuirá con su talento a ayudarle
en la consecución de sus metas. Para ella, tu futuro será importante, y no es
probable que insista en tener su propia profesión después de casada (a menos
que la hayas decepcionado profundamente, o que una crisis económica pasajera
haga necesario que ella también trabaje). Es posible que en privado las peleas
sean borrascosas, pero en público te defenderá con fiereza, y no tolerará que
nadie te calumnie ni se aproveche de ti. Los que lo intenten sentirán la herida
de su justa cólera. Tu felicidad será siempre lo primero. A menos que en su
carta natal haya aspectos adversos a su signo solar o a su ascendente, te
ayudará pacientemente a perseverar hasta que consigas lo que quieres, sin
quejarse ni lamentarse de tus esfuerzos; eso si, puede mostrarse un tanto dura
si te desalientas por el camino. Escorpio espera que apuntes tan alto como tu
capacidad te lo permita, y si te quedas corto, eso puede costarte algunos
comentarios y observaciones bastante sarcásticas, sobre todo si Mercurio tiene
influencias desfavorables.
La mujer Escorpio adora su hogar, que generalmente
aparece brillante de limpieza, buen gusto y comodidad. Las comidas se sirven a
su hora, y generalmente las cosas marchan bien. Si sucede lo contrario, algo
muy desdichado debe ocurrirle a tu chica, porque su inclinación natural la
lleva a la belleza y al orden. Para la mujer típica de Escorpio, la limpieza de
primavera es una fiesta. Le encanta revolver rincones para ver que encuentra...
y ten cuidado de que al ordenar los roperos no encuentre en tus bolsillos notas
misteriosas con un dejo de perfume. Escorpio es irrazonablemente desconfiada,
aún cuando no haya base para sospecha alguna, de modo que imagínate lo que
puede pasar si encuentra un indicio de auténtica infidelidad. Imagínate una
nube en forma de hongo y tendrás una idea general de lo que puede suceder, en
términos figurados. En cambio no tiene sentido que sospeches de ella, por mas
oportunidades que surjan, y habrán muchas, ya que Escorpio nunca deja ver sus
sentimientos mas profundos. Claro que puede ser que eso te plantee unas cuantas
preguntas; pues trágatelas, junto con el nudo en la garganta. Lo mismo que esa
cómoda cerrada con llave que ella guarda desde su niñez, hay cosas que
constituyen terreno vedado y de nada te servirá insistir. Cierto, ya se que eso
no es justo. Y ella también lo sabe, pero no por eso las cosas cambian, en
absoluto: son como son. Tómala o déjala, y lo más probable es que la tomes,
porque a Escorpio es casi imposible dejarla. En el mejor de los casos, su
recuerdo te acosará toda la vida. Adaptarse a las peculiaridades de su
naturaleza es más fácil que padecer las pesadillas que experimentarás por
haberla dejado. En realidad, a la mujer Escorpio no hay quien la deje, ¿no lo
sabías? Los que lo han intentado pueden decírtelo. Sea como fuere, tienes una
mujer muy especial.
Por más que necesite la seguridad de un hogar con
raíces, si una mudanza es necesaria para tu profesión, a ella no le asustará el
desarraigo. Es una esposa excelente para militares o marinos, y una verdadera
joya para un político. No hay nadie a quien su mirada no traspase, ni engaño
que se le escape. Una mujer Escorpio puede decirte exactamente en quien puedes
confiar y a quien debes vigilar. La mujer Piscis tiene la misma capacidad, pero
tiende a ser demasiado blanda en la crítica, siempre esta dispuesta a buscar
excusas para los fallos ajenos. Escorpio no. Al contrario, es fácil que tenga
que refrenar la agudeza de su lengua y atemperar la brutalidad de su juicio.
En el apartado económico, las mujeres de este signo
son totalmente impredecibles. Son capaces de cuidar y ahorrar los centavos
hasta hacerlos valer el doble, y de pronto experimentar un ataque de
estrafalario derroche. Una cosa es segura: que el dinero le gusta, ya sea que
lo guarde en un zapato o se lo gaste en extravagancias, pero es una mujer que
busca siempre el prestigio, y no dejará que el dinero lo ponga en peligro.
Estará contenta de que hayas elegido una profesión que te proporcione ingresos
menores, siempre que ofrezca la seguridad de no depender de nadie y la
posibilidad de llegar a convertirte en alguien influyente; a las mujeres
Escorpio les gusta el poder, y por él son capaces de sacrificar muchas cosas.
Le bastará con tu poder, porque Plutón le permite adaptarse a disfrutar con los
logros de terceros, cuando a ella le cuadra. Recuerda que por mas que se
sacrifique y se las arregle con muy poco para conseguir un objetivo propuesto,
es demasiado orgullosa para pasarse la vida en un ambiente sórdido, y se
resentirá y amargará muchísimo si se ve obligada a hacerlo durante demasiado
tiempo. En tal caso, o bien tratará de provocar un cambio en la suerte de la
familia, o se refugiará gradualmente en el mundo funesto de la Lagartija
Gris, que por fuera acepta la pobreza, y casi parece disfrutar con ella, pero
interiormente está llena de intensa amargura.
Será posesiva, pero se negará a dejarse poseer. Uno
de los peores rasgos de estos nativos, varones o mujeres, es su negativa a ver
ningún otro punto de vista que el suyo cuando están en juego las emociones.
Necesitan semanas de introspección para acercarse a algo que se parezca a la
humildad. Su natural interés por el sexo opuesto, aun si es platónico, te dará
motivo para estar tan celoso de ella como ella lo esta de ti. Lo más probable
es que ocasionalmente fascine a todo hombre que se le ponga a tiro, y que tú
tengas que esperar mientras los hipnotiza. Lo normal es que las cosas no
lleguen a ser graves, pero pueden provocar algunos momentos incómodos, y también
pueden ser causa de desacuerdos. En el calor de la batalla, conviene recordar
que su compulsión a igualar puntos hace, por lo general, que sea ella quien
gane todas las escaramuzas y diga la última palabra. Si le dices una mentira,
ella te dirá dos. Si a la mañana, después de una discusión, te niegas a darle
el beso de despedida, es posible que durante un mes ella te niegue el de las
buenas noches. En caso de que tu madre (o la madre de quien fuere) criticará su
forma de cocinar, es probable que Escorpio se olvide de invitarla a cenar
durante varios domingos seguidos. Sin embargo, perdonará una ofensa accidental,
si sabe que fue sin intención. En Escorpio, el sentido de la justicia es tan
fuerte como el sentido de la venganza, cosa que la mayoría de la gente olvida.
Escorpio recuerda todas las bondades, y también las devuelve con creces. Las
dos cosas son válidas. Con los niños, es posible que en sus expresiones de amor
falten matices de ternura y demostraciones abiertas, pero de todas maneras los
pequeños percibirán la profundidad de su devoción y se sentirán emocionalmente
seguros. Una madre Escorpio no dejará que los talentos de sus hijos pasen
inadvertidos o se desperdicien. Dedicará muchas horas a alentarles en la
persecución de metas elevadas, y estará siempre dispuesta a brindarles el apoyo
que necesiten. Cuando se planteen los problemas de la juventud, encontrarán en
ella a una persona fuerte y servicial, a quien su conocimiento de la naturaleza
humana convierte en sagaz consejera. Es una madre que les enseñará a hacer
frente a las dificultades con el mismo valor de que ella hace gala, pero que
puede cegarse para sus defectos y, naturalmente, si no se la reconoce y se la
rectifica a tiempo, esta última actitud puede provocar muchos problemas. Escorpio
aplastara a cualquiera que, a su entender y de la manera que fuere, constituya
una amenaza para la felicidad de sus hijos, y me temo que eso incluye a su
marido. Si él es más estricto con los niños de lo que ella considera que debe
ser, no le gustará nada.
Aunque a veces pueda estar a punto de ahogarte en
su pasión de vivir, si os encontráis en una verdadera tormenta, una mujer
Escorpio, con su razonamiento frío y sereno y su fuerza de acero será una tabla
de salvación. Aunque ejerza su magia de extrañas y secretas maneras, sus ojos
obsesionantes te mirarán siempre con básica honradez, por más que ella se
mantenga más allá del alcance de la humana comprensión. Tal vez sea un poco
peligrosa, pero indudablemente, es atractiva. Deja que otros maridos se conformen
con las chicas juguetonas, tú conoces el misterio apremiante de esa encantadora
bruja que te prepara un té excelente y no te quema jamás las tostadas. (Bueno,
casi nunca.) Cuando la taza esté vacía, deja que ella te lea la buenaventura en
las hojas de té. Es muy capaz de hacerlo... si quiere. ¿Cómo dices, que no lo
sabias? Pero ya te dije que hay secretos que ella se guarda...