EL INSOMNIO
El insomnio es un reflejo de nuestro estado
interno… puede ser de mucha energía, y como consecuencia estar muy ansioso, o
estar muy preocupado y angustiado y por eso estoy tan lleno de pensamientos en
mi cabeza que no puedo conciliar el sueño.
Punto uno debemos hablar de la actitud a tomar ante los conflictos: en el hecho
de encontrarnos con un conflicto solemos tomar tres tipos de determinaciones,
estemos o no conscientes de ello:
1- No veo el conflicto, mejor dicho lo niego, mi consciente no lo registra y yo
creo que sigo con mi vida normalmente, pero mi inconsciente sí lo registró, en
consecuencia no me puedo dormir, lo intento y me siento cada vez más ansioso,
genero cada vez más adrenalina.
2- Veo el conflicto, y aún así decido no mirar, hacer como si no existiera. En
este caso mi consciente ya ha registrado la situación, y al no dar lugar a mis
sentimientos de confusión, enojo, miedo o angustia, los guardo y eso me produce
una congestión mental-emocional que aparece cuando quiero acallar los
pensamientos y dormir sin pensar… ERROR!
Los pensamientos se agolparán cada vez con más
fuerza y si me instalo en ellos provocarán esos sentimientos que no quise
entender en su momento, lo que acarrearán lágrimas, dolores de pecho o
estómago, de cabeza, etc. Esto hará que las ideas que atraigan sean del mismo
tenor de mi estado interno, comenzaré a recordar todas y cada una de las
situaciones en que esa persona, o una situación similar, me hizo sentir de la
misma forma.
3- Decido tomar conciencia del conflicto con el fin de pensar acerca de él,
tratar de ver soluciones, crear opciones de transformación, hacer lo posible
por observar el problema y pensar qué es lo que debo aprender de él, sobretodo
si no es la primera vez que me sucede.
ORIENTACIONES:
Si podemos, manejar concientemente la respiración, tomando referencia de si
estamos respirando con dificultad, tratando de hacer la respiración más baja a
medida que nos vamos tranquilizando, o sea llegar a una respiración abdominal.
El famoso té de tilo antes de dormir, o de cualquier hierba calmante: puede
utilizarse también la melisa, bergamota, azahar, jazmín, loto, canela, que
colaboran a cambiar los sentimientos negativos.
Otro recurso es el baño de inmersión en agua tibia, ayuda a relajar nuestros
músculos y nuestras tensiones emocionales, le podemos colocar esencias al agua,
o flores de lavanda o jazmín, echar algo de tilo directo al agua.
Tomar contacto si no es en el baño con una compresa de agua tibia y algún
perfume relajante, o que nos guste mucho, si no es una esencia y colocarlo en
la frente mientras escuchamos música suave, puede ser clásica, mantras suaves.
Tratar de no ver televisión entre media hora y cuarenta y cinco minutos antes
de dormir
No es recomendable leer algo de auto conocimiento o
autoayuda antes de dormir pues se pueden disparar sentimientos de culpa o
frustración y actuaríamos en contra de nuestro objetivo.
Un recurso más: dar masajes suaves con cremas de caléndula o algunas de las ya
nombradas esencias en frente y sienes, también en zonas de detrás de las orejas
y donde fluye la sangre: muñecas, ingles, y todas las articulaciones.
Mover lentamente la cabeza a un lado y otro tratando de descontracturar el
cuello, hacer rotación de hombros hacia atrás y adelante, muy lento.