LA VIRGEN DEL ROCIÓ
Es la historio de la lucha de un pueblo.
Un prodigio de La Virgen que hizo desaparecer a un ejército de ochocientos infantes de Napoleón.
Todo parecía indicar que el expolio estaba garantizado.
El miedo recorría las calles de aquel pueblo fervoroso que luchaba por la salvación.
Almonte esta condenado a la muerte...
El ejercito de Napoleón habia invadido un país sumido en la miseria.
Pueblos y ciudades enteras arrasadas y en una pequeña localidad onubense se presentía la llegada del ejercito invasor.
Habían pasado dos años, desde aquel mítico dos de mayo de 1808, en el que el pueblo español se sublevó ante la represión que ejercía Napoleón.
Un grupo de almonteños que luchaban en la resistencia conocieron que un alto mando del ejercito francés, que había tomado el pueblo, se encontraba instalado en la casa de la familia Cepeda, en la calle del Cerro, donde habia establecido su cuartel general.
Desde allí había mandado advertencias al pueblo de incendiarlo y cortarle el cuello a los habitantes.
Los almonteños encontraron el lugar donde cometer el asalto..., el agujero del portón de la casa. Y así fue. Esperaron a que el general apareciera y, con una escopeta lo asesinaron de un tiro.ç
La puerta por la que disparo aquel almonteño fue donada por la familia a la hermandad, que la tiene en el museo de la casa hermandad en el pueblo.
Por su parte, ante tal suceso, las tropas francesas informaron al mariscal Soult, que se encontraba en el cercano pueblo de La Palma del Condado y este, indignado mando un ejercito de ochocientos infantes que llevaban la orden de arrasar la villa y degollar a sus vecinos.
Los almonteños, atemorizados, se encomendaron a la Virgen del Rocío que se encontraba en la parroquia del pueblo para que les protegiera. Y se obró el milagro.
Por causas desconocidas, los ochocientos infantes que esperaban no llegaron al pueblo y el mariscal Soult se conformó con llevarse primero al alcalde quien, sorprendentemente fue liberado al día siguiente en la localidad de Hinojos. El pueblo se había salvado.
Con motivo de estos acontecimientos prodigiosos y cuando el ejercito napoleónico abandonada España, el pueblo del Almonte, en agradecimiento a la Virgen, acordó el 16 de agosto de 1813 hacer un voto por el que en adelante y para siempre pasaran la madrugada del 19 de Agosto en el Rocío, celebrando por la mañana una misa solemne votiva en acción de gracias.
Nace el "Rocío Chico".
J. Macías ABC