SABIDURÍA ORIENTALLA MEDITACIÓN
Se busca cultivar los habitos positivos y seguir una ética natural que evite el sufrimiento de uno mismo y de los demás
La visión penetrante
La sabiduría intuitiva, junto con la concentración, y una base ética, constituyen los tres pilares fundamentales de la práctica budista.
Vipásana es un término sánscrito, traducido generalmente como conocimiento intuitivo, que significa literalmente "mirada que discierne" o "visión penetrante".
Se refiere a un conocimiento vívido e intuitivo de la naturaleza ultima de las cosas, mas allá de toda percepción distorsionada.
No se trata de una inteligencia racionalista ni de acumulación de conocimientos, ni, por supuesto, se basa en creencias: es una percepción clara e incisiva que percibe las cosas tal como son.
Por extensión, vipásana se aplica también al método de meditación que, por medio del reconocimiento intuitivo de tres características básicas de la existencia (su transitoriedad, su carácter insatisfactorio y su insubstancialidad) conduce a la experiencia directa de la verdadera naturaleza del ser y de la existencia.
Así se consigue la extinción de esa percepción superficial y errónea de la realidad en la que tienen su raíz todas las actitudes destructivas, y, trascendiendo el ego, se accede al logro de las metas de la meditación budista: el estado de nirvana o la budeidad.
A diferencia del samatha, que también se practica en otras tradiciones, la meditación vipásana es una aportación del budismo y constituye la técnica principal -ya sea separada o combinada con otras- para el desarrollo de la sabiduría intuitiva que lleva al nirvana.
Aunque a veces en Occidente se la considera un exponente de la escuela budista clásica o theravada, el vipásana se práctica en todas las tradiciones budistas, como la tibetana o la del zen.
